Pagando el precio de llegar a la cima



cima_pagar

Como llegar a la cima

Visto primero en: IMCP-GDL

Oí hablar una vez de un hombre joven que, en su afán por llegar a la cima, fue a visitar a un millonario muy conocido para pedirle un consejo sobre cómo hacerlo.

¿Cuál es la razón principal de su éxito? preguntó. Trabajar muy duro, contestó el millonario. Defraudado, el joven inexperto respondió, ¿Y cuál es la segunda razón? Nos causa gracia el deseo de este joven de obtener una fórmula rápida y fácil, pero su contestación plantea una pregunta mucho más seria para las personas que no están haciendo lo que a ellos les gustaría hacer:

¿Tú tienes la intención de pagar el precio para llegar allí?

Tu no consigues un título pagando un precio de ganga. De hecho, el costo es a menudo mucho más alto que lo que muchas personas están preparadas para pagar. Yo he visto cantidad de ejemplos de este tipo. Las personas se embarcan en nuevos proyectos con energía y entusiasmo, sólo para fracasar cuando comprenden cuánto esfuerzo tienen que hacer.

Si ellos hubieran evaluado el costo primero, si ellos hubieran investigado lo que les demandaría para hacerlos exitosos en esa área, en serio podrían haber ido en otra dirección. En cambio, vuelven adonde empezaron con gran descontento y desilusión.

La manera de evitar que esto suceda es clara, evaluar el costo de hacer lo que te gustaría hacer antes de empezar.

¿Dónde está la etiqueta del precio?

1. Trabajo duro  No hay otra manera, no puedes cumplir tu sueño sin mucha sangre, sudor, y lágrimas, y quizá incluso un poco de esfuerzo físico.
Tendrías que pasar tiempo, quizás grandes cantidades de tiempo, trabajando diligentemente en cosas que no te gustan para llegar finalmente a hacer lo que quieres.

2. Aprendiendo  Alcanzar tu sueño puede exigirte que adquirieras algunas nuevas habilidades, existentes o alcances otro nivel. ¿Has intentado consagrar el tiempo, dinero y energía a hacer que esto suceda?

3. La disciplina  Esto lo enfoca y lo compromete a alcanzar su meta sin ser desviado y sin rendirse. El éxito no viene solo. Tienes que tener la intención de alcanzarlo, y eso lo da la disciplina.

4. El cambio  A simple vista, esto no podría parecer como un precio significante. Después de todo, no te meterías en este ejercicio si no deseas un cambio en tu vida. Aun así, todos nosotros sabemos, que el cambio no es fácil. Puede causar stress, ansiedad, incertidumbre, y una multitud de otras emociones un tanto incómodas.

5. La vitalidad emocional  En el camino hacia la realización de eso que tu amas, vas a tropezar y sin duda pasarás por algunas duras caídas. Cuando eso pasa, tienes que tener la fortaleza interna para levantarte, desempolvarte, y continuar. ¿Lo está haciendo?

Recuerda que los detalles específicos varían de trabajo a trabajo. Un camino podría requerir un costo más alto en el área de aprender, mientras otro podría tomar un alto costo en la vitalidad emocional.

Si tu sabes lo que quieres hacer pero no lo estás haciendo todavía, detén la fabricación de excusas y encuentra la salida. No esperes hasta que todo sea perfecto para empezar porque nunca será todo perfecto. No lo aplaces hasta mañana porque mañana tu serás tentado para aplazarlo hasta el próximo día y así nunca lo harás.

Y cuando empieces, acuérdate de estas tres verdades.

1. Hacer lo que quieres hacer será diferente a lo que has imaginado.

2. Será más difícil de lo que alguna vez imaginaste.

3. Pero, serás mejor de lo que alguna vez imaginaste.