Auditoría Forense. ¿Ciencia o técnica?



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Auditoría Forense

¿Ciencia o técnica?

C.P.C. Guillermo Williams Bautista, MCIE, CRMA, CFE

Socio-Director de Auditoría Forense del Noroeste S.C.
Vicepresidente Regional
Gubernamental del IMCP Noroeste.
Vicepresidente de Legislación del IMCP Sonora.


Muchas veces durante nuestras pláticas y conferencias me han preguntado cual es la diferencia entre una auditoría financiera y una auditoría forense, razón por la cual supongo que puede ser un tema de interés para algunos de nuestros lectores, he aquí que plasmo una opinión muy personal al respecto.

El principal error que cometemos es pretender que las diferentes disciplinas de la auditoría se realicen bajo un solo formato, de tal manera que las auditorías de desempeño, las de cumplimiento, las de tecnologías de la información, las auditorías de obra pública y civil, las auditorías administrativas, las auditorías financieras, las auditorías operacionales y las auditorías forenses (entre otras), no deberían de realizarse en su contenido particular sobre un mismo catálogo de procedimientos de auditoría.

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Si bien es cierto que el proceso de auditoría de hecho debe de seguirse, (planeación, ejecución e informe), en el caso de la auditoría forense, el esquema de revisión de los registros contables de una organización y de la representación fiel de la situación financiera en sus propios estados financieros, así como su análisis detallado, aunque resultan imprescindibles, son apenas una parte de la consecución del objetivo principal de este tipo de encomiendas, objetivo que se refiere a descubrir o sacar a la luz pública los posibles eventos de fraude que se hayan realizado en determinado ente financiero.

En específico, dentro del proceso de auditoría forense, me atrevería a incluir de manera muy importante el método científico, esto es derivado de los posibles sucesos de fraude, el realizar la observación sistemática, la medición, la experimentación, la formulación, el análisis y la modificación de hipótesis, así como la obtención de la comprobación de estas, resulta un factor clave para encontrar a los posibles defraudadores, poder reunir la evidencia suficiente y competente así como dar con sus “modus operandis”.

Las principales características de un método científico válido son la falsabilidad, la reproducibilidad y repetibilidad de los resultados además de la factibilidad de la corroboración por revisión efectuada entre pares. Algunos tipos de técnicas o metodologías utilizadas son la deducción, la inducción, la abducción, y la predicción, entre otras.

La deducción, es un argumento donde la conclusión se infiere necesariamente de las premisas, y esto es importantísimo para la auditoría forense dado que nadie nos va a decir en una primera instancia que cometió un fraude, sino por el contrario, tratarán de engañarnos de conformidad con la naturaleza de este tipo de conductas anómalas; de esta manera, a partir de las premisas que serían para el caso los indicios y evidencias, llegaríamos a nuestras conclusiones que serían los elementos de convicción de la existencia del evento de fraude.

La inducción, es una forma de razonamiento en que la verdad de las premisas apoya a la conclusión, pero no la garantizan, y esto es sumamente importante en nuestra auditoría forense, dado que, para construir un camino cierto al proceso de abducción, los hechos de forma independiente deben de ser comprobados y comprobables.

La abducción, es un tipo de razonamiento que a partir de la descripción de un hecho o fenómeno ofrece o llega a una hipótesis, la cual explica las posibles razones o motivos del hecho mediante las premisas obtenidas. Y esto lo debemos de utilizar de manera cotidiana al elaborar nuestras teorías de cómo se cometió el fraude solo como una manera de conducir nuestra investigación, en pos de demostrar que en realidad nuestra hipótesis fue elaborada de manera correcta o de que realmente no nos equivocamos de imputados, de hechos, de montos, de conductas, etc.

Por último, la predicción en el contexto científico es una declaración precisa de lo que ocurrirá en determinadas condiciones especificadas, de tal forma que esta predicción la utilizamos mucho para efectos de colocar banderas antifraude, para concatenar los hechos, para demostrar las hipótesis del cometimiento del fraude y para explicar de manera científica porque no estamos equivocados en los señalamientos.

A nosotros como contadores nos quedan bastante claros los conceptos de observación sistemática y la medición, así que trataré de explicar los demás conceptos y como se utilizan en nuestros trabajos de auditoría forense.

La falsabilidad o refutabilidad es la capacidad de una teoría o hipótesis de ser sometida a potenciales pruebas que la contradigan, aplicado a la auditoría forense esto es, cuando encontramos un fraude en una empresa debemos mencionar circunstancias de modo, tiempo y lugar, es decir cómo se cometió el ilícito, cuando y donde, pero en nuestra explicación debemos de encontrar, basado en investigación forense estas circunstancias presentando pruebas de carácter irrefutable.

Y esto es bastante importante, porque en juego, debemos estar conscientes, en la mayor parte de las veces, está la libertad de las personas, por lo cual nuestros elementos de convicción deben de estar firmes y bien realizados, so pena de posiblemente enjuiciar a personas inocentes y los llamados de conciencia personal que esto conllevaría.

La reproducibilidad es la capacidad de un ensayo o experimento de ser reproducido o replicado por otros, en particular, por la comunidad científica. La reproducibilidad es uno de los pilares del método científico.

Esto es aplicable cuando recurrimos a el uso de estadística y técnicas de auditoría asistida por computadora (TAAC´s), cuando aplicamos la Ley de Benford (que en sí mismo es un análisis de los datos que parece ilógico pero que resulta comprobable científicamente), además de cuándo se pueden obtener los mismos resultados a partir de la base de datos original y las cadenas informáticas empleadas en minería de datos, por citar un ejemplo (Data mining).

Por el contrario, en este contexto, la repetibilidad se refiere a la posibilidad de obtener resultados consistentes al replicar un estudio con un conjunto distinto de datos, pero obtenidos siguiendo el mismo diseño experimental, así mismo, el término está estrechamente relacionado al concepto de testabilidad o la capacidad de un determinado estudio a ser probado con resultados satisfactorios.

La factibilidad de la corroboración por revisión efectuada entre pares es la evaluación del trabajo realizada por una o más personas con competencias similares a las de los productores del trabajo (pares). Y que funciona como una forma de autorregulación de miembros calificados, en este caso con las credenciales y conocimientos suficientes para examinar el fraude.

Esta cuestión resulta definitivamente trascendente pues nuestros informes en cuestión de la demostración de la comisión de un ilícito deben tener esa pulcritud, de que un experto en la materia con los conocimientos adecuados llegue a esas mismas conclusiones bajo las mismas circunstancias.

Ahora bien, existen materias eminentemente científicas como la criminología, la criminalística, los cálculos biométricos, la documentoscopía, la grafoscopía, la victimología, la ingeniería, la química, la física, la medicina, la psicología, entre otros conocimientos, que cotidianamente deben de ser aplicadas en nuestras auditorías forenses, paso a explicar vagamente como se realiza el trabajo coordinado con especialistas de estas materias, en algunos de estos conocimientos de carácter científico.

La documentoscopía, por ejemplo, es la rama de la Criminalística que tiene por objeto el estudio, análisis e investigación de los distintos documentos, sean estos de trascendencia jurídica o de investigación, a fin de determinar su autenticidad o falsedad e identificar a su autor; utilizado ante una gran cantidad de documentos en nuestras revisiones de auditorías forenses.

La Grafoscopía, es la disciplina que se ocupa del examen de los grafismos con el fin de establecer la autenticidad del origen gráfico de firmas o manuscritos, este estudio puede ser utilizado para determinar la técnica de la falsificación e identificar al autor de la misma, y que es necesaria por mencionar unas cuantas opciones, cuando trabajamos con fraudes basados en falsificación de autorizaciones, pagos, recepción de documentos, etc.

Criminología: La criminología forense es el estudio científico del delito, los delincuentes y las víctimas para su aplicación en los ámbitos de la investigación criminal y de aplicación de la justicia; un verdadero auditor forense reconoce conductas, perfiles, áreas de oportunidad de la comisión del delito, se adentra en los hechos realizados para la comisión del fraude y no establece límites como pudiera ser la sola revisión documental.

A efecto de diferenciar la criminología de la criminalística, podemos decir brevemente que la criminología tiene como objeto principal estudiar el delito y la conducta delictiva. En cambio, la criminalística se limita al hecho delictivo y sus evidencias, es decir para este último caso, nuestra investigación debe de incluir como una de sus características principales el apegarse a todos aquellos elementos que por si mismos o de forma concatenada nos permiten describir que es lo que se hizo, como se hizo, cuando se hizo, donde se realizó, quien lo efectuó, cuanto se defraudó y hasta porque se cometió en este caso el fraude, pero de manera independiente, cosa por cosa, caso por caso.
Mientras que la victimología forense es el estudio nomotético e ideográfico de las víctimas de crímenes para direccionar la investigación y asuntos forenses.

Entendiéndose por nomotético cuando el dato se compara con conocimiento previamente establecido, con categorías que las agrupan, privilegiando el dato empírico y por ideográfico cuando el dato se inserta dentro del conocimiento que se tiene del mismo caso, tratando de comprender el suceso por sí mismo sin necesariamente comparar con otros eventos.

La principal ayuda que nos entregará la victimología es comprender cuales fueron los errores organizacionales que se cometieron y que, en su caso, abrieron la brecha de oportunidad para cometer la defraudación, así mismo, y de manera muy importante, que soluciones debemos de recomendar tanto para que el evento no vuelva a suceder como para sanar todo el “stress” causado a la organización y los eventos post-delito.

Mientras que la psicología forense resulta trascendente para estudiar el perfil del posible defraudador. En nuestra experiencia, algunos defraudadores logran pasar ante la vista de personas no familiarizadas con estudios suficientes como examinadores de fraude y logran pasar por diversas revisiones sin levantar la más mínima sospecha, sin embargo, el conocimiento de estos perfiles de manera nomotética y la valoración de los hechos en el sentido ideográfico nos permite definir nuevas formas de esconderse o disfrazarse por parte del perpetrador, por lo cual la psicología forense resulta trascendente para entender la conducta de este tipo de delincuentes.

La psicología forense además resulta de gran utilidad al realizar las entrevistas o los interrogatorios que serán una pieza fundamental para nuestra investigación forense, y estas mismas deben de trabajarse con un método perfectamente probado como puede ser la técnica de Reid, la utilizada por la FBI, o la recomendada en el Manual Internacional de Examinadores Forenses.

Por su lado la biometría (del griego bios vida y metron medida) es la toma de medidas estandarizadas de los seres vivos o de procesos biológicos.

Usted va a pensar, ¿y esto como para qué? Bueno, supongamos que el fraude se ha cometido en la venta de medicamentos que no cumplen con las condiciones para superar la enfermedad que han prometido curar (eso me suena muy familiar), ahora imagínese una cuantificación de daño monetario sin demostrar que el medicamento fuera en sí mismo un fraude.

De tal forma que, aunque en lo particular no me considero un científico todavía, si comprendo que nuestras auditorías forenses deben de estar fortalecidas con procedimientos de esta índole; si bien es cierto, algunas de estas mismas serán sumamente sencillas y no necesitarán más que una buena investigación, un adecuado soporte y una entrevista técnicamente bien realizada, la verdad es que el hecho de pensar que la auditoría forense se realice de igual forma que los otros tipos de auditorías sería ilógico, puesto que no tendría ningún sentido llamarle de manera diferente a un proceso de planeación, investigación, revisión, informe y opinión que fuera igual a una auditoría financiera.

La auditoría forense definitivamente tiende hacia la ciencia, aunque claro y por supuesto, que esta es solo mi humilde opinión, ¿usted ya tiene la propia?.